El poder de la mente sigue siendo un misterio, porque los pensamientos, así como ciertos hábitos, se despiertan y no se los puede controlar con sencillez. Simplemente suceden, brotan y atraviesan. Por eso los rasgos de la personalidad motorizan el estudio.
Julio Chávez abrió su corazón de par en par en la mesa de Mirtha Legrand y se animó a exhibirse al natural, con total sinceridad y honestidad. El actor no gambeteó la propuesta de abordar algunas temáticas bastante profundas, como su relación con la ansiedad.
Todo en un marco de una charla entretenida, en la que participaron Andrea Pietra, Dan Breitman y Mario Massachessi. La conversación derivó a rincones particulares y Juana Viale le transmitió la inquietud al prestigioso actor: “¿Sos ansioso?”.
Así surgió en escena la revelación de una insólita, o poco habitual, manera de transitar de Julio en situaciones como los vuelos en avión: “Si soy ansioso, mucho. Además soy catastrófico y para evitar la catástrofe pienso en catástrofes, compito con el destino. Por ejemplo pienso ‘Voy a perder la valija, se va a caer el avión’”.
Ante la extrañeza de la confesión, la nieta de Mirtha Legrand redobló: “¿Y cómo haces en una escala?”. Lo que activó otra alocución muy singular de Chávez: “En esos casos sufro, creo que no va a llegar, pienso en lo que voy a perder, me digo a mi mismo ‘Julio perder cosas no es perder nada’”.
En la continuidad de su locuaz descripción, el artista agregó: “Me pongo triste, siento que no tengo nada en la vida, que he perdido todo. Hemos perdido todo, hay que volver a construir el pueblo de Israel. Todo eso”. Tremenda revelación que provocó risas entre los comensales.
