Luego de lanzar la bomba de su ruptura con un comunicado en las redes, Benjamín Vicuña se llamó al silencio y decidió no decir nada más sobre el tema. Hasta ahora, cuando, abordado por el movilero de LAM, accedió a romper el silencio y ponerle el pecho a las preguntas.
De muy buen humor, o ya directamente resignado a cómo es el juego, Benjamín arrancó dejando en claro que lo que atraviesa con la China “son temas que se viven a puertas cerradas”. “Es difícil convivir con ustedes, queridos…”, se quejó, con una sonrisa.
Y cuando el cronista quiso ir a fondo y saber si sentía que la ruptura con la mamá de Magnolia y Amancio era cosa “definitiva”, Vicuña respondió: “Mi foro íntimo tendría que ir a buscarlo al fondo. No sé si ya me queda foro íntimo… ¡Es fondo íntimo!”.
Sin ganas de soltar prenda ni de quedar expuesto, el actor, que está a punto de volar a España para reencontrarse con sus hijos y la actriz, fue muy políticamente correcto a la hora de hablar de su ex pareja y de sus supuestos amoríos en el Viejo Mundo.
“Es la madre de mis hijos, es preciosa y muy buena persona. Yo soy feliz si ella es feliz y me parece muy bien”, expresó, a la par que insistió en que la separación se dio en “buenos términos” y que todo está más que bien con Eugenia, a quien hoy le llueven rumores de romance con bellos modelos y actores españoles.
Finalmente, Benjamín hizo su descargo contra el asedio de la prensa en este momento difícil de su vida personal. “No hay forma de hacer las cosas para que les gusten a todos. A pesar del dolor, intento entender los contextos cuando en los programas hablan de lo que pasa…. “, explicó.
“Pero cuando se habla de depresión, de enfermedades… ¡Hay que tener un poco de cuidado y de respeto!”, siguió. Y buena onda, pero firme en su postura, cerró: “No quiero parecer un tipo pesado, peeero…ya pedí respeto, no lo hubo. Ahora trato de ser más ´canchero´”.
