El dolor por la muerte de Diego Armando Maradona alcanzó a todos. Grandes, chicos y viejos. Se fue un ídolo popular, quizás el más grande de todos los tiempos. Y si bien el velorio se está llevando a cabo en este momento en Casa Rosada, sus familiares pudieron despedirlo a cajón abierto en la intimidad.
Y Verónica Ojeda, como mamá de su hijo más chico, Dieguito Fernando, llegó hasta Balcarce 50 para despedir a quien fue su pareja durante ocho años. Pero no lo hizo sola.
Verónica llegó a Casa Rosada ataviada con un traje de riguroso color negro. De la mano iba su hijo, quien a su vez tomaba de la mano a la pareja de su mamá, el abogado Mario Baudry. En absoluto silencio, los tres caminaron juntos el trayecto de entrada a la Casa de gobierno para darle el último adiós a Diego.
Verónica Ojeda se enteró a través de Jorge Rial sobre el fallecimiento del exfutbolista. “A mí me pasó algo increíble en medio de todo esto. Me tocó a mí darle la noticia a Verónica Ojeda”, reveló el conductor de Intrusos. “Le escribo y le pongo ‘¿Cómo está Diego?’. Me responde ‘¿Por? Bien’. A lo que le pongo que lo llame”, sumó.
“Entonces Verónica me llama y le dije ‘mirá, no sé nada más que esto. Algo está pasando. Llamalo’. A los 5 minutos me llama. No me dice que está muerto, pero me dice que algo está pasando llorando y llorando. Le digo ‘cortá conmigo y andate para allá’. Y después de eso vino la confirmación”, finalizó.