En el marco del lanzamiento de un tema musical, el cual contó con un videoclip que protagonizó junto a Marcelo Polino, Ricardo García y Adriana Aguirre, la actriz y ex vedette fue víctima de hurto, después chocó con su auto y por último sufrió una descompensación.
En tanto lucha por justicia y aguarda para que le permitan ver las cámaras de seguridad del boliche en el que estaba esa noche, Alejandra Pradón confesó el mal momento que pasó y las consecuencias de haberse hecho mala sangre por lo sucedido.
“Hicimos el estreno en un bar de Palermo llamado P.U.T.O, me descuidé media hora y me robaron la cartera con toda la documentación. Terminé con mi representante yendo a la comisaría. Me robaron todo, no solo la cartera llamativa acebrada y la documentación sino que también todos los maquillajes”, comenzó la artista en diálogo exclusivo con Paparazzi.
Y siguió: “Había luces de cámaras, medios cubriendo…. . Lo que más me duele es el polvo volátil de Christian Dior, el polvo volátil traslucido de Loreal, los delineadores waterproof, lo de los labios, anillos, colgantes, cosas que uno va guardando en la cartera para no ir cambiando. Me robaron todo”.
COMO Y POR QUE ALEJANDRA PRADON CHOCO SU AUTO IMPORTADO
En cuanto al procedimiento luego de que le robaran su bolso, Pradón detalló: “Ricardo García llamó a la policía, vinieron 5 patrulleros, fuimos a la comisaría, hice la denuncia y volvÍ al boliche. Era domingo a las 23 horas y el comisario pidió las imágenes y le dijo que no, que se las armaba para la semana. Nunca las dieron”.
“Ahora vamos por daños y perjuicios. Volví sin comer nada, angustiada, enojada y dormí una hora. Salí al banco y a llevar la denuncia. Cuando volví me desvanecí. Marcha atrás choqué la luneta del auto contra la pared y no me lo cubre el seguro. Una pesadilla. El cristal de atrás de la camioneta es importado y lo tengo que pagar yo”, relató Alejandra en cuanto a la odisea y las consecuencias del mal trago que pasó.
“Nos pidieron dos días que esperemos por las cámaras y ya pasó una semana. Revisamos baños, containers de la calle, nada. La pasé re mal. Tuve que salir a comprobar lo que tenía y es muy caro todo. Gurruchaga 1877, Palermo es el boliche que quedó asentado en mi denuncia. Astille todo el vidrio. Menos mal que es doble y la chapa también. Menos mal que no me pasó nada. Estoy muy estresada con todo lo que está pasando”, remató Pradón.
