Gran Hermano se convirtió en el programa favorito del público por todas las polémicas que ocurren dentro y fuera del reality más famoso de todo el país. Y es que, en las últimas horas hubo varias sanciones por malos comportamientos.
Quien la pasó peor en la semana fue nada más ni nada menos que Lucila, conocida como La Tora. La joven realizó la espontánea y se la anularon por complot. Como si fuera poco, perdió el beneficio de líder tras sacarse el micrófono y andar por la casa sin él. Además, de hablar en susurro.
Ahora bien, tras el tenso momento, La Tora decidió defenderse en el confesionario y contó que ella nunca se sacó el micrófono. Sin embargo, las pruebas que demuestran lo contrario la dejaron en evidencia: “Yo nunca me saqué el micrófono. Dijo que la persona a la que le hablé no lo tenía, porque yo nunca me lo saco”.
Cabe recordar que fue Gran Hermano quien le comunicó la sanción a Lucila frente a todos sus compañeros: “Salvo por descanso, por higiene personal o en instancias de recreación en la piscina, el micrófono jamás debe ser retirado”.
“Sin embargo, detecté una situación en la que Lucila le habló al oído a un compañero sabiendo que no llevaba el micrófono colocado. En el hecho al que hago referencia se han cometido dos desobediencias: hablar en susurro para comunicarle un mensaje secreto a un compañero y deshacerse deliberadamente del micrófono”, reveló.
Fue entonces que Gran Hermano le comunicó la sanción a La Tora tras sus pésimos comportamientos: “Lucila, por esta conducta has sido sancionada y se te anulará el derecho adquirido de salvar a uno de tus compañeros nominados esta semana”.
