El escándalo lo desató la buena de Karina Mazzocco en su programa de América, A la tarde. Allí fue donde se viralizó un video donde se puede ver al genial actor Carlos Perciavalle, de 80 años, peleándose a los gritos con su empleada, en su hermosa casa de Laguna del Sauce, en Uruguay.
“¿Y esa casa cómo estaba? ¿Cómo me atendió a mí? ¡Como el culo! !Como el culo!”, empieza gritando Carlos, viejo amigo de Antonio Gasalla. “¿Viste lo mal agradecido que es?”, dice una mujer. “Agradecidos tendrían que estar ustedes que han vivido y viven hace 25 años con casa para todos, con comida para todos, con guita para todos”, le respondió el actor en una escena digna de una película violenta.
El que tomó las imágenes sin autorización fue el productor uruguayo Jimmy Castilhos, que había ido a visitarlo. “Esto yo lo digo como testigo, no hablo desde la especulación sino desde los hechos que viví. Me encontré con una persona que estaba con miedo, una persona que se sentía abandonada”, relató.
“Miguel Bermúdez, quien es pareja de Carlos desde hace 50 años, tuvo un ACV y eso lo golpeó fuertemente a él. Quiero tener mucho cuidado con lo que digo porque no quiero lesionar a nadie, esto lo hago para cuidar a Carlos”, aseguró quien también es periodista en el programa de Mazzocco.
“En los últimos días he vivido lo que fue el desenlace de esta situación. Carlos tenía la voluntad de que estas personas se fueran de la casa, no sabía cómo hacer y me pide mi intervención. Yo considero que por un lado cometí un error, pero mi único gran acierto es defender a mi amigo como podía”, dijo sobre el despido de las empleadas.
Perciavalle vive a 12 kilómetros por ruta de un paraje y por eso necesita vivir acompañado ya que no maneja: “Está en una situación de vulnerabilidad", describen.
"Yo agradezco que exista este video porque nos ha permitido trabajar toda la información que tenemos nosotros, porque cuando yo empiece a hablar y a contarles todas las cosas que le han pasado a Carlos en los últimos años no solo se van a sorprender, sino también a indignar”, sumaron.
“A lo largo de muchos años todos han ido comiendo de allí, y hoy Carlos está en una situación paupérrima, sin dinero, sin un solo peso, pero no quiero entrar en detalles. Yo no puedo hablar hasta que el juez no lo diga, pero quiero presentar el caso para que quienes tienen que actuar lo hagan”, terminó.
