No todo lo que brilla es oro, como tampoco todo lo que suena es afinado, dulce y azucarado: detrás de los escenarios, los compases, los conciertos, los discos y los recitales muchas veces se esconden conflictos, celos, peleas y roces como los que había entre vedettes en el teatro de revistas. Y así como la serie de Luis Miguel desnudó todos los problemas que acompañaron su extraordinaria carrera, quizás algún día una producción intente desentrañar cuál es el conflicto que le impide a Paulo Londra tocar o hacer música hace más de un año.
Londra era, en efecto, el rey del trap a nivel local. El indiscutido número uno. El de mayor proyección, tanto a nivel argentino como internacional. El más conocido de todos los que se adentraban en ese género. Sus temas daban la vuelta al país -y a buena parte del continente- y su éxito parecía no tener techo. Cada día subía un peldaño más. Era, de verdad, imparable.
Lo que puso un freno al ascenso de Londra fue una cuestión contractual. El artista pretendió tocar por afuera de la productora que lo tiene firmado -llamada Big Ligas- y eso le generó un conflicto de intereses que al principio pareció superable pero con el correr del tiempo se fue agigantando a niveles impensados. "Paulo no miró la letra chica cuando puso el gancho y, como casi siempre que pasa eso, lo engramparon", dicen por lo bajo en el círculo íntimo del cantante.
Enfadado, Londra anunció que acudiría a la justicia para romper el contrato y poder trabajar con libertad. Y como ya se sabe, los tiempos de la justicia no son los de los artistas ni mucho menos los de los fanáticos. Para colmo, la pandemia tiene estancadas -o cuanto menos empastadas- todas las cuestiones judiciales. Días más, horas menos, Londra lleva más de un año con el micrófono colgado. Al menos comercialmente.
Cuando estalló el conflicto, una de las artistas que salió a bancar a Londra con una serie de fuertes tuits fue María Becerra, que en los últimos meses vio multiplicada exponencialmente su popularidad al compartir protagónico de un clip con Tini Stoessel y al presentarse como estrella en la apertura de Showmatch, el día que Marcelo Tinelli volvió tras un año y medio rompió la barrera de los 20 puntos de rating. En aquel momento, ella no dudó en criticar a los que se querían quedar con el dinero de los artistas.
Pero ahora Becerra se fotografió junto al canten Ovyonthedrums, muy cercano a Big Ligas y muy alejado de Londra, con quien compartió temas, éxitos y presentaciones pero ahora está enfrentado a suerte y verdad. Además, subió la foto y escribió "Un placer trabajar con vos, Ovy", lo que sonó a cambió de actitud y a darle la espalda a Londra, a quien había apoyado en su momento. Esa actitud le valió una avalancha de recriminaciones por parte de los seguidores de Paulo, quienes en su gran mayoría anunciaron que estaban dispuestos a cancelarla.
