Luego de que en Intrusos dieran a conocer la noticia de que Gastón Recondo había tomado una medida determinante a fin de cerrar la fábrica y no tener más hijos, fue el propio periodista quien habló al respecto y dio detalles de la intervención a la que se sometió.
El panelista de Polémica en el Bar es padre de Cecilia (17), Bautista (15) y Jesús (13), fruto de su matrimonio con María Fernanda, y Juan Francisco (7) y Gerónimo (3), de su pareja con Valeria Marcovecchio, con quien se casó en septiembre del 2013.
Conforme con sus cinco hijos y priorizando el bienestar de su mujer, a los 48 años Recondo decidió que lo mejor era no seguir agrandando la familia y se sometió a una vasectomía, que consiste en la ligadura de los conductos deferentes a nivel escrotal, con el fin de impedir el pasaje de espermatozoides.
“Cuando tuvimos a nuestro hijo menor, hace tres años y medio, teníamos que ver cómo íbamos a seguir cuidándonos. De hecho, en un control que fuimos a hacer con el obstetra, él nos preguntó qué íbamos a hacer. Entonces yo le pregunté a mi mujer si estaba de acuerdo con que yo me hiciera una vasectomía”, comenzó explicar Gastón.
Y, en diálogo con La Nación, el periodista pro pañuelo celeste agregó: “Me parecía injusto que, si tomábamos la decisión de cerrar ahí, ella tuviera que vivir tomando pastillas o con algo invasivo como es un DIU. El método que puede usar el hombre, que es el preservativo, tampoco es del todo seguro”.
"Me parecía injusto que ella tuviera que vivir tomando pastillas o con algo invasivo como un DIU. Así que, cuando estuvo de acuerdo me hice una vacectomía", explicó el periodista.
“Yo sentía que ella ya había hecho mucho de su parte cargando a nuestros hijos en su panza y pasando por los dos partos. Así que, cuando ella estuvo de acuerdo, se lo planteamos al obstetra. Lo hice en octubre de 2019 y ella tenía 33 años en ese momento. Así que quería aliviarle el tiempo que le quedaba por delante de cuidados”, continuó Gastón.
“Me operé un viernes. Entré a las seis de la mañana al sanatorio, a las siete y media me metieron en el quirófano y, a las doce del mediodía, ya me estaba subiendo al auto para volver a mi casa. No tuve dolores. Falté al trabajo solo el día de la intervención e hice reposo las primeras 72 hs”, cerró Recondo luego de animarse a la cirugía no reversible.
