Charlotte Caniggia armó sus valijas, cargó toda su indumentaria de alta gama, se sentó en primera clase y voló a México, pero no fue para vacacionar o disfrutar del sol en las arenas blancas.
La hija de Mariana Nannis consiguió trabajo rápidamente, tras su fallido paso por La Academia, donde protagonizó un escándalo con Pampita y defraudó con su escasa preparación de cada gala, al punto de ser eliminada.
Lo cierto es que la mediática se sumó a un reality en tierras aztecas, que se llama Acapulco Shore 8, que se emite por la cadena MTV. Claro que su llegada generó conmoción y la recepción distó de un clima agradable.
La blonda se acopló a un grupo de participantes en el capítulo once, lo cual causó sorpresa y muchos de ellos compartieron su percepción, su primera impresión de conocerla. Así cayó con un traje blanco, lentes oscuras y su personalidad excéntrica.
Lo primero con lo que se topó Charlotte fue con el desconocimiento de su padre, dado que al saludar a sus compañeros lanzó la información de la carrera de Claudio Paul, pero nadie lo registró. Por eso se la escuchó decir: “Pensé que iba a saber quién era mi papá”.
En cuanto a los veredictos de los participantes, algunos acudieron a palabras elogiosas, menos Carime que rápidamente le sacó la ficha y exclamó: “Es una boluda de sangre azul”. Lo que pronostica una relación tensa entre ellas.
Como si fuese poco, esta misma mexicana no se guardó nada y disparó: “Se ve que ella se tuneó y que tiene varios millones invertidos en su cuerpo”. Evidentemente a Charlotte le va a costar sentirse cómoda en esa mansión de Acapulco.
Por otro lado, sobre todo los hombres expresaron:“Es muy guapa. Olía súper rico. Es la diversión en persona”. Mientras la hija de Nannis se quejaba que no le sirvieron suficiente champagne.
