En las últimas horas, Cinthia Fernández no tuvo ni un minuto de descanso, y es que sus tres hijas la mantuvieron ocupada con la caída de sus dientes de leche y, además, la modelo vivió un accidente de tránsito que se solucionó de una manera muy curiosa.
Para empezar, la panelista de Los Ángeles de la Mañana compartió con sus más de cinco millones de seguidores el paso a paso de los dos dientes que perdió Francesca, aunque también reveló que hubo un poquito de ayuda de su hermana Bella, quien con sus manitos terminó de sacar el tramo final. Asimismo, otra de sus pequeñas también perdió uno de sus dientes y obligó al Ratón Pérez a concurrir a su casa por partida triple.
Pero el momento más serio llegó cuando Cinthia contó, a través de su Instagram, con lujo de detalles cómo fue el accidente de tránsito que vivió y dejó sorprendidos a todos sus followers con la ocurrente resolución: “Ayer andaba muy triste porque perdí a un ser muy querido para mí. Por eso no aparecí… Para los que preguntan si choqué, no me pasó nada, fue un topetón de la camioneta con una moto”.
No obstante, para llevarle tranquilidad a todos los que se preocuparon por su salud y por la del conductor, la modelo continuó: “No le pasó nada a nadie porque estábamos parados, solo que arrancó el semáforo, la moto arrancó y se apagó o trancó, no sé qué sucedió, y yo arranqué y la trompa empujó a la moto”.
Para sorpresa de todos, Cinthia explicó que terminó de la mejor manera posible con aquel motociclista y hasta confesó que pegaron buena onda en el medio de la escena: “El chico un amor, no fue culpa de ninguno, cosas que pasan y nada grave. Es más, el chico es repartidor y conseguí un servicio de mensajería de confianza gracias al topetón”.
“Fue muy dulce, justo en un día muy especial y triste para mí, me dijo ‘fue el mejor choque de mi vida porque te conocí’ jaja, así que un amor. Dicho esto, arriba y a cambiar energías, la vida es esto, buenas y malas”, concluyó la panelista con emojis de corazones y revelando un impensado pero divertido final feliz.
¡Inesperado!
