Como un tsunami que arrolla con todo. Jimena Barón regresó al ámbito público con mucha fuerza, diseminando todo tipo de fuegos artificiales. La cantante volvió con virulencia para en escasos días comunicar un sinfín de novedades de su vida privada.
La autora de La cobra rompió el silencio de meses en sus redes sociales y lo hizo con una bomba, dado que estrenó una canción, “Flor de involución”, que refiere directamente al calvario que experimentó en la convivencia durante la cuarentena con Daniel Osvaldo.
La actriz exhibió cómo se prepara para el nuevo desafío laboral, que se entrelaza con la posibilidad de formar parte del jurado de La Academia, junto a Pampita, Ángel de Brito y Hernán Piquín. Un rol que dista de todo lo realizado.
Como si fuese poco, para Barón significa una especie de revancha, dado que ha participado en diversas ocasiones en la pista y fue víctima de devoluciones encarnizadas. Por eso, la artista dejó entrever algo de sus sentimientos sobre esta función.
Jimena aprovechó la sesión de fotos oficiales del reality para generar contenidos en sus redes. Así captó un video de cómo posaba para las cámaras y lo posteó en las stories. Claro que lo llamativo llegó con el mensaje que le agregó a lo audiovisual.
Barón lanzó una picante consideración, una especie de crítica al redactar: “Cuando finalmente ya nadie puede juzgarte y encima te pagan por juzgar a los demás”. La mayoría de las críticas a esta concepción se centraron que la cantante será estricta en un plan de bronca por como la trataron a ella en la pista.
