El 2021 quedará grabado a fuego en la vida de Jorge Rial, por diferentes hechos disruptivos, que lo marcaron como nunca antes en el plano profesional. Y como si faltara algo para el animador, en las últimas horas llegó el mayor cimbronazo.
El conductor histórico acaba de anunciar públicamente que América decidió prescindir de sus servicios y finalizar unilateralmente un vínculo laboral de más de dos décadas. Una situación shockeante, que a pesar de las versiones que circulaban no se auguraba una definición en tan corto tiempo.
Jorge describió públicamente lo que aconteció a través de su cuenta de Twitter, donde se subió a dejar un mensaje corto, conciso, pero muy movilizante. “Hoy firmé mi rescisión con @AmericaTV. 20 años de dejar todo resumido en cuatro líneas”, posteó.
Con ese texto da a entender que la separación incluyó un frío mecanismo de carta documento, en la que probablemente la gerencia se haya expresado de manera escueta. Pero eso no fue todo, porque Rial agregó algunos detalles más.
En su programa de radio, Argenzuela, el periodista aportó algunos pormenores más, que ratifican el modo poco elegante que habría elegido la emisora para comunicarle su desvinculación. “Me mandaron una moto con papeles para firmar. Te contrata el gerente y te echa el portero”, exclamó.
Una frase impresionante, que retrata lo que se presupone un desenlace agrio entre Rial y la gerencia del canal de Palermo. Un modo de terminar una relación de 22 años, en la que el comunicador fue la nave insignia de la pantalla de América. Evidentemente algo se rompió tras el fracaso de TV Nostra.
La premonición de Rial
Hace cuatro días, Paparazzi encontró a Jorge en la puerta de la emisora, cuando el sol se ocultaba, y con un lenguaje corporal de cansancio. Probablemente, el periodista llevó a cabo en esa jornada su última reunión con las autoridades.
Lo cierto es que en ese instante, Rial aportó indicios de lo que se vendría, porque ante la consulta del cronista aportó una frase que grafica lo que terminó cristalizándose. “Me fui de la TV, estoy feliz, estoy muy bien en la radio. Y no hablo más de la TV. ¡Por ahora, hasta que vuelva! No estoy con ganas de volver. No a Intrusos, a la TV”, exteriorizó.
En una primera instancia, la reflexión invitaba a pensar en un cansancio por todo lo que vivió en los últimos meses álgidos y que tras los coletazos de la marea podía llegar una reconciliación con la pantalla, para un retorno. Por lo menos no se dará en América.
