Si bien a lo largo del reality Marcos manifestó una personalidad tranquila, pacífica, de bajo perfil y sumisa, bastante distinta al resto de sus compañeros, en este tramo final y luego de que los que aún están dentro recibieron la visita de familiares… esas diferencias se vieron más pronunciadas aún.
En la gala del lunes 20 de febrero los participantes fueron sorprendidos por la producción de Gran Hermano ya que ingresaron un pariente de cada uno de los que siguen en competencia a fin de hacerles más amena y llevadera la estadía que resta para conocer quien será el ganador de esta edición.
Y fue allí que entre los distintos familiares, el salteño se reencontró con Valentina, su hermana quien vive en el exterior y suelen pasar mucho tiempo juntos cada vez que se vuelven a ver. Y fue en esa convivencia que, a pocas horas de entrar a la casa, el primo y su compañera se aislaron del resto.
Pero el motivo de la distancia que tomaron, o de los momentos en los que eligen estar solos y tranquilos, alejados de sus pares, tiene que ver con un estilo de vida que ambos promulgan: el de la relajación y meditación, a fin de tener paz emocional y mental. Y cómo las cámaras de Gran Hermano todo lo ven… esos ratos a solas también.
Sentados a la sombra, y en tanto el resto de los participantes se mostraban eufóricos y tratando de sobresalir entre el resto y recolectar datos del afuera, los hermanitos aprovecharon este reencuentro para ponerse al día, tomar aire fresco y practicar esa técnica milenaria que consta de ejercicios mentales. Esa actitud no cayó del todo bien entre el resto. Algunos, incluso, los acusaron de hacer "rancho aparte"
Los hermanitos salteños disfrutan del reencuentro y estadía en la casa meditando y manteniendo largas charlas a solas.
Tal es así que fueron los propios fanáticos del programa quienes lograron capturar de la plataforma Pluto TV dicho momento entre Marcos y Valentina donde se la ve a la joven y nueva integrante de la casa respirar y exhalar al tiempo que el primo se encontraba recostado sobre el césped tomando sol. ¡Hermanitos zen!
