Existir, existió. El vínculo entre las sombras de la China Suárez y Mauro Icardi sucedió, tuvo lugar, se manifestó y se corporizó durante algunos meses. Incluso brotaron a la luz algunas capturas del tenor de ese lazo, de ese coqueteó infernal.
Wanda Nara descubrió algo en el celular del delantero y así salió a gritarle al mundo que María Eugenia era una “zorra” por entrometerse en su matrimonio y su familia. Incluso, la blonda exclamó que se había separado y a los días aseguró que habían firmado los papeles de divorcio.
Entre las capturas que se exhibieron en los medios, principalmente en LAM, se percibió con claridad lo que Mauro sentía por Súarez, dado que se divisó la frase: “Sos la mujer de mis sueños”. Hasta que el delantero le agregó una concepción desagradable al referirse a su esposa y su matrimonio: "Yo a Wanda ya no la quiero más como pareja. La dejé de querer. Sólo la veo como madre de mis hijos, como una hermana".
Con esas pruebas se analizó que Nara e Icardi transitaban por una profunda crisis, a pesar que se encargará, sobre todo la blonda, de exhibir en las redes sociales otro tipo de realidad, siempre sonriente y con las beldades de su cotidianidad de millonarios.
A pesar de todo este contexto, Wanda decidió exponerse públicamente y revelarle al planeta que había perdonado la infidelidad de su marido e incluso tuvo tiempo para escribir en esa confesión que para ella nunca aconteció ningún cortocircuito con Icardi.
"Las fotos que fui subiendo los últimos meses muestran lo bien que estábamos y lo felices que éramos", escribió la mediática, al menos esa es su versión de la historia, tal vez esa fue la percepción que captó, algo diametralmente opuesto a lo que sentía Mauro, al menos por la declaración que le hizo a la China en sus chats hot. "Ella fue la causal de todo el caos", terminó.
