La imagen de Rocío Oliva (30) llorando en las puertas de la Casa Rosada por no poder ingresar a despedir a Diego Maradona recorrió todas las redacciones periodísticas.
De eso hablaban en Los Ángeles de la mañana cuando Yanina Latorre fulminó a la última mujer del Diez. “Me escribió para decirme que se estaba yendo, que no la habían dejado entrar a despedirse. Me dijo que fue un momento muy doloroso, porque sentía que tenía la necesidad de despedirse y que era lo que correspondía. Fue su última pareja”, dijo Ana Rosenfeld, abogada de Rocío Oliva y actual panelista de LAM.
Fue entonces cuando Ángel de Brito informó que la lista de personas que podían entrar al velorio íntimo la había armado Claudia Villafañe. “La lista la armó Claudia, las chicas y sus hermanos, que también formaron parte”, dijo.
Y cuando Mariana Brey aseguró: “Mirá ella fue sabiendo que no estaba entre los invitados especiales y hay que decirlo porque si no una vez más Claudia queda como la mala de la película”, Yanina arremetió.
“Es lo que corresponde por lo que es la mujer que lo bancó y cuidó siempre. A Rocío se le pidió que lo vaya a ver en vida antes de morir, él estaba muy deprimido, él quiso verla para sus 60 años y ella dijo que no. Él murió, es una causa médica desde ya, pero muchos le endilgan un poco la tristeza y depresión que tenía, porque aunque entiendo que ella lo dejó, él la amaba y cuando la necesitó ella no fue”, disparó Yanina Latorre sin piedad.
“Los familiares estaban muy molestos porque estaba llorando en la televisión en vez de irlo a ver y podría haber faltado al trabajo la verdad”, indicó de Brito en sintonía con la angelita de su programa.,
