¿Thiago juega a dos puntas? Es probable. Después de batir junto a Daniela el récord de "intensidad amatoria" de todos los Gran Hermano -hicieron el amor cuatro veces distintas en una misma noche- ahora está cada vez más cerca de Nacho y el coqueteo se ha puesto, cuanto menos, intenso y fogoso.
Una ola de calor azota a Buenos Aires y a gran parte del país. Salvo la Patagonia más austral (Chubut, Santa Cruz, Tierra del Fuego, las queridas Islas Malvinas y la Antártida) todo el territorio argentino está "bajo fuego", con temperaturas que promedian los 35 grados y "sensaciones térmicas" que van más allá de los 40.
Sin embargo, hay un lugar donde esos números parecen "un inviernito": la casa de Gran Hermano. Allí, los "chicos" están verdaderamente "on fire" y son capaces de romper cualquier.... termómetro. Y también eso que pensaron en primera instancia.
Para climas tan pesados, nada mejor que un chapuzón en la pileta. Y ellos que no tienen más "actividad" que dejar pasar el tiempo, ver quién queda nominado y despedir a los que se las toman por el voto de la gente la tienen a disposición las 24 horas del día. Si se levantan y se quieren tirar, lo hacen. Lo mismo al mediodía, a la tarde o a la noche. No hay vecinos que se quejen por un ruido a las tres de la matina, por ejemplo.
Los pibes le daban desigual pelea a un sol abrasador (de brasa que quema y chamusca, no de abrazo que abriga, contiene o enternece) cuando Thiago fue a buscar a Nacho por "millonésima vez" y medio que le comió la boca en plena piscina. ¿Y Daniela? Bien, gracias. O arreglándose las pestañas, que para el caso es lo mismo.
Nacho y Thiago son "shipeados" por las redes sociales casi desde que empezó el juego. El "shipeo" es la acción de la gente en redes sociales cuando alienta a dos personas a fundirse en una pareja. Se les suele poner nombre a esos "deseos de relación", y en el caso de ellos dos se los llamó "Nachiago" desde entonces. Cuando vieron estas imágenes en la pileta, quienes forman parte de se fandom (hinchada o grupo de seguidores) se sientieron alcanzados por un refrescante chorro de agua bendita.
