Desde tiempos memorables, los proyectos de Cris Morena no solo se convirtieron en éxitos rotundos, sino que también le dieron la oportunidad a decenas de actores y cantantes de poder presentarse en la televisión y ganar popularidad con sus extrovertidos personajes.
No obstante, a medida de que los años fueron pasando y la sociedad fue cambiando algunas de sus costumbres, se empezaron a ver con otros ojos los diálogos, las escenas y la elección de aquellos niños, ya que todo giraba en torno a la belleza estética que traía como consecuencia la obligación de ser delgado.
A pesar de que en las redes sociales aún hoy se juzga a la otra persona por su aspecto físico y, sobre todo los famosos, reciben cientos de repudiables comentarios sobre su apariencia, se intenta cortar con esa línea de pensamiento y recalcar que la belleza natural no es la que está determinada por los estándares de hace un tiempo atrás.
En este contexto, se vivió un incómodo momento en el programa de Jey Mammon, cuando Cris visitó al conductor y hablando sobre la posibilidad de hacer una remake de Jugate conmigo, apuntó que quien podría llevar a cabo este nuevo proyecto sería Santiago del Moro por su delgadez, o el mismísimo Jey, siempre y cuando “bajara un poco de peso”.
Estas palabras generaron un fuerte rechazo en el público y se abrió un nuevo debate sobre el mensaje que da un productora tan exitosa a las nuevas generaciones que escuchan sus palabras.
Para ahondar sobre diversos temas, incluyendo este, Angie Balbiani estuvo como invitada al piso de Intrusos, en donde además de hablar de su embarazo, recordó cómo fueron aquellos años en los que ella trabajó de la mano de Cris Morena en Rebelde Way, interpretando un personaje de una “chica gorda”.
“Siempre tuve sobrepeso. En la secundaria no tenía un problema con mis amigas pero sí el sexo opuesto te catalogaba, ‘ahí está la gorda’”, comenzó relatando la actriz y expanelista del ciclo de América.
Asimismo, rememoró cómo llegó al proyecto que la puso en la televisión: “Y después entré a trabajar con Cris y ahí hacía un personaje de la chica gorda. Entonces, cuando termino de trabajar con ella, fui con un médico que me dio pastillas para adelgazar”.
"Entré a trabajar con Cris y ahí hacía un personaje de la chica gorda. Entonces, cuando termino de trabajar con ella, fui con un médico que me dio pastillas para adelgazar”
“Me dejó flaca pero no era disfrutable lo que estaba pasando. Y quedé embarazada de mi primer hijo, por suerte dejé las pastillas pero el impacto fue fuertísimo porque mi metabolismo no funcionaba directamente”, contó con pesar.
Además, removiendo las arenas del encuentro entre la productora y Jey, Angie opinó: ”A mí no me sorprendió pero porque tampoco le caería a Cris, per sé. Me parece que ella es de una generación en la que siempre el tema de estar flaco es un beneficio”.
Por su parte, reflexionó sobre las opiniones de un tercero sobre el cuerpo de una persona y qué impacto pueden causar aquellas palabras: “Cuando a vos te dicen 'qué flaca que estás', te están diciendo un halago. No tienen ni idea si la mina está anoréxica, si tiene una enfermedad, o mil otras cosas”.
"Le podemos caer a Cris, pero no es ella la persona. No es la única. Representa a toda una generación ese tipo de pensamientos”, argumentó Balbiani aclarando que el conflicto es cultural y no solo de Morena.
Continuando con su experiencia, la entrevistada reveló que con 21 años ingresó a Rebelde Way en donde estaba “mejor parada” que el resto de las jóvenes, y que aunque “nunca escuchó decir en voz alta” a Cris sus pensamientos sobre la figura, se daban por aludidos con sus acciones.
"Nunca la escuché decirlo, pero de vuelta no le quiero caer a Cris porque yo tuve la suerte de tener unos kilos de más y hacer Rebelde Way. En ese momento el peso me jugó una buena pasada y también creó que me ayudó a colaborar con muchas chicas que les pasa esto y no tenía visualización”, concluyó.
