Rápidamente Camila logró el cariño de sus compañeros en Gran Hermano, en gran porcentaje por su carisma y una estrategia que por ahora le está dando resultado, la de supuestamente no haber visto nada del reality. Para congeniar aún más, contó detalles de su vida y generó discordia entre los hombres.
La situación en particular incluye a su hermana y al novio de esta. Mientras relataba la experiencia todos la escuchaban atentamente, pero cuando le pidieron explicaciones de por qué hizo lo que hizo, su respuesta no fue del agrado de los presentes, Maxi, Nacho, Tora, Marcos, Agustín y Alfa, con quien se lleva mejor que nadie.
“Una vez el novio de mi hermana se quedó a dormir en mi casa y mi hermana se fue a entrenar a la mañana. Bueno el pibe me tiró onda y a mí me pareció un poquito lindo, y bueno fue la única vez que me pasó y la cuestión es que después estuve yo con el chico”, comenzó Lattanzio mientras los demás la miraban atónitos.
Y agregó: “Me lo empecé a comer, y viene mi hermana y el chabón ya quería estar conmigo. Ella lo echó, lo re cagó a puteadas. No, no, yo no tenía nada que ver, mi hermana estuvo con el pibe”. “Bueno, estas cosas pasan y uno a veces siente cosas en el momento...”, señaló Maxi.
Lejos de quedarse callada y dejar que todo terminara ahí, la oriunda de Ituzaingó presionó aún más la moral de los presentes y decidió aclarar que no lo hizo por un impulso, sino por ser mala persona, al menos en ese momento: “Fue de hija de puta, nomás, porque yo no sentí nada por ese chico”.
Si Camila tenía pocas chances de que Marcos la mirara con otros ojos, más allá de la amistad, con la anécdota que contó esfumó todo tipo de posibilidad, ya que el salteño tiene una personalidad bastante determinante, en donde no acepta este tipo de hechos poco éticos.
