Es un mito, peeeroooo: cuenta la leyenda que Canal 13, "cansado" de esperar que Nelson Castro inicie los trámites jubilatorios, intenta por todos los medios "deshacerse" de su mítico periodista. Con ese objetivo, aseguran, lo mandan a cubrir los eventos más riesgosos y temerarios del mundo. Visitar los restos radiactivos de Chernobyl, infiltrarse en la Ucrania invadida y destrozada por Rusia o, ahora, desembarcar en una Israel que le acaba de declarar la guerra a Palestina. Y casi "se le da". Apenas llegó, el conductor de Telenoche ya vivió un momento de altísima zozobra.
Al arribar a medio oriente, Castro, de 68 años, comenzó a desempeñar sus funciones profesionales precavido de que algo le podía suceder y conociendo a la perfección todos los alertas a los que debía estar atento. Sobre todo, las sirenas que avisan la proximidad de un ataque aéreo.
A simple vista, Nelson no parecía un corresponsal de guerra. No llevaba pantalón camuflado, chaleco verde oliva ni casco polvoriento en la cabeza. Tampoco portaba una bandera blanca o algún cartel que avisara que es alguien de la prensa internacional. Estaba prolijamente vestido con un impecable traje marrón y una camisa blanca que de seguro no tenía ni una arruguita. Los mocasines lustrados, las medias recién cambiadas. Un lujo, pero algo incómodo y apretado para salir corriendo.
Castro caminaba serenamente con sus asistentes y su camarógrafo cuando empezaron los sonidos del terror. El ulular de la sirena lo puso de sobreaviso. Algo malo estaba por suceder y era el momento de olvidar la rigurosidad profesional y priorizar la integridad personal. En pocas palabras, o traducido al criollo: se pegó un julepe de aquellos y tuvo que salir rajando para salvar su vida. Alrededor suyo todo eran gritos y desesperación.
CASI MATAN A NELSON CASTRO EN ISRAEL
El susto fue gigante no sólo para Castro, sino también para todos sus colaboradores y, por supuesto, también para los que los veían desde acá, desde la Argentina: toda la secuencia pudo verse al instante ya que Nelson estaba transmitiendo "en vivo y en directo" para TN.
Castro se sumó a la "legión" de enviados de los medios argentinos que ya habían iniciado C5N y La Nación+, pero es el primer periodista que llega desde nuestro país, ya que los otros o estaban por la zona o viajaron desde Europa, donde cumplen funciones como corresponsales. Ojalá vuelva sano y salvo y Canal 13 vea nuevamente postergadas sus "intenciones". Es un chiste, claro está. Muchas veces, en situaciones como estas el humor es imprescindible.
