Pilar Fernández denunció al Teto Medina por abuso sexual y maltrato físico y psicológico. En su visita al programa de Karina Mazzocco, A la Tarde, relató su horrible experiencia con el conductor. Cabe recordar que esto ocurrió hace años, pero recientemente se conoció la decisión de la Justicia sobre el caso.
Hasta no hace mucho el comunicador era el centro de críticas por estar preso en la causa de un centro de lucha contra las adicciones clandestinos. Pero ahora su situación se complicó, ya que su ex pareja parece que al fin conseguirá que se escuche su voz.
El primero en dar la noticia fue el periodista Pampa Mónaco, que dijo en sus redes sociales: "Procesaron a Teto Medina por abuso sexual con acceso carnal y lo embargaron por mas de 20 millones de pesos. Además le impusieron restricción de acercamiento a la victima".
Luego, Martín Candalaft aportó mayor información: “El Teto Medina fue procesado por abuso sexual en tres oportunidades, todas con la misma víctima, una chica que dice haber sido su pareja por cinco años, desde el 2015 al 2020. Sin embargo, él dice ‘apenas si la conozco’”. Remarcó que Medina la llamó 193 veces en una noche y que ella teme por su seguridad y la de su hijo.
QUÉ DIJO PILAR FERNÁNDEZ SOBRE LOS ABUSOS DEL TETO MEDINA
“En el medio de la noche, él se despertó, ‘me tapó la boca y, en posición de cucharita, me decía que él había entrado en mi cuarto y que él era mi papá, que yo era la hija chiquita, era la nenita, que no tenía que contar nada’. Me tapaba la boca con las manos, me decía que la fantasía de toda mujer era acostarse con su padre. Me daba asco, no me gustaba, él se ponía encima y no podía moverme", sostuvo Pilar Fernández.
"Se sacó dos cartucheras de bala y las dejó para que pudiera verlas. Me apuntó con el arma en la cintura y me dijo: ‘dale, hdp, vamos’. Un día me hizo llamar a todos los arquitectos con los que trabajaba, por teléfono en altavoz, para preguntarles si había mantenido relaciones sexuales con ellos. Me retuvo 36 horas en un hotel. Él iba a tomar algo con amigos y yo seguía ahí encerrada. Me metía cocaína en el vaso, me ponía cocaína en los labios y me besaba. Además, me tiraba del pelo porque me decía que no le gustaba”, sumó.
