Tras un 2020 bien intenso para Susana Giménez ya que contrajo coronavirus en Uruguay y estuvo internada por varios día generando una enorme preocupación en sus seres queridos, la diva recibió este nuevo año con una inmensa alegría y acompañada por su familia en La Mary, la costosa chacra que tiene en José Ignacio.
A través de su cuenta de Instagram, la conductora mostró una imagen del festejo donde se la ve puede ver muy relajada y vestida de blanco, típico color para esta fecha, y reunida junto a hija Marcela Sarabayrrouse, su nieta Lucía Celasco, sus hermanos Patricio y Carolina, su cuñado, Diego Mejuto, su asistente personal, Dolores Mayol, su asesora de imagen, Marcela Amado y sus sobrinos, Paquito y Guadalupe.
"Listos para recibir el 2022", escribió Susana junto a la postal familiar, que cosechó en pocas horas más de 86 mil "Me Gusta" y cientos de buenos deseos.
Esta semana, volvió a mostrarse activa en su red social de Instagram, donde la siguen más de 2,7 millones de seguidores, y de una forma muy peculiar.
Ya todos saben que Giménez no es amiga de la tecnología ni mucho menos de las redes sociales que constantemente se van actualizando y eso hacer confundir a las personas que no las entienden mucho. Tanto es así que, en las últimas horas, compartió una sorpresiva imagen suya que dejó a todos con la boca abierta.
Se trata de una selfie que, al parecer, subió por error a sus historias y donde se la ve acostada en su sillón y... ¡a cara lavada! Lejos de mostrarse maquillada y totalmente cuidada como suele hacerlo, la presentadora publicó una fotografía al natural, sin una gota de maquillaje, con su pelo recogido y con una vincha en forma de moño.
¿Qué estaba haciendo Su? En dicho posteo, se mostró con anteojos y muy concentrada leyendo el libro "Nunca", del autor galés Ken Follett. "Me tiene atrapadísima", escribió junto a la imagen hogareña. Sin embargo, minutos después se arrepintió de mostrarse en este estado y la eliminó.
Para los usuarios no pasó desapercibida y muchos le hicieron captura, como en otras ocasiones, haciendo que su publicación al natural se haga viral en el mundo 2.0. Y sí... ¡fue furor!
