La conclusión de una relación amorosa implica un dolor emocional, un cúmulo de sensaciones angustiantes que se apoderan de las fibras. Claro que el trance se maximiza ante la exposición pública de esa decisión personal, dado que la cargosa atención de los medios provoca una repercusión todavía peor.
Ese fue el caso de Mercedes Funes, que en 2007 se divorció de Nico Vázquez, al poco tiempo de transitar por el registro civil y luego de más de seis años de noviazgo. En esa época, los paparazzis persiguieron a ambos artistas en el tratamiento de la noticia.
Todo esto regresó al presente de la actriz, ya que en su visita a PH rememoró todo lo que vibró en su interior en ese duro trance, más allá de toda el agua que transcurrió bajo el puente. Ante la consigna que impuso Andy Kusnetzoff, Mercedes confesó: “La pasé mal. Tuve un divorcio mediático hace muchos años, de otra vida, otra vida".
En la continuidad del relato, la protagonista de cientos de éxitos narró: "Eramos muy chicos y obviamente no la pasé bien, porque no tenía nada que ver con mi cotidianeidad y de un día para el otro salía a comprar queso y había una guardia periodística, me perseguían fotógrafos y no entendía nada. De pronto cada cosa que hacía parecía muy importante para el mundo".
En cuanto a su postura frente al hostigamiento de los medios, Mercedes reflexionó: "El momento fue bravo para mí, fue difícil de manejar... Igual entendí que nadie toma de vos lo que vos no le permitís. Yo sabía lo que no me interesaba mostrar de mí. Pero se frena solo si vos no respondés".
Lejos de dramatizar o poner el foco en los motivos de aquel divorcio, Funes contó: “Aprendí a que si vos entendés cuáles son los límites, podés aprender a decir que no y a que nadie entre adonde vos no querés que nadie entre. Y en lo personal transité lo que todas las personas que tenemos uniones, separaciones y la vida continúa".
