Roberto García Moritán (43), el marido de Pampita, pasó por Podemos Hablar, el programa que Andy Kusnetzoff conduce por la pantalla de Telefe, y habló de todo. Sin experiencia en los medios de comunicación, el economista se prestó a una amena entrevista en la que contó detalles del comienzo del romance con la top model.
Antes de conocer a la pampeana, Roberto llevaba separado 12 años de su primera esposa, Milagros Brito, con la que tuvo a su dos hijos, Santino y Delfina y que tiene la mejor con Pampita. “Yo ya los últimos años estaba con ganas de conocer a alguien, de volver a darle una oportunidad a la familia”, admitió.
Pero claro, aquellas palabras no eran sinónimo de conquistar a una de las mujeres más lindas de la Argentina. Sin embargo, él se animó y activó el modo de conocerla a través de una amiga de ella. Se le dio y la conquistó. Y con aquella conquista llegaban nuevas experiencias…
"Nuestros hijos, desde el primer minuto, tuvieron trato de hermanos, se pelan como hermanos, se tratan como hermanos, se extrañan como hermanos", aseguró Roberto.
“Caro le pidió a Blanquita que le mandara a alguien y aparecí”, dijo con soltura pero sin perder el lugar de invitado no famoso, lo que conforma una de sus nuevas experiencias. Otra, quizás mucho más importante, es que por primera vez desde su divorcio, el empresario apostó a ensamblar una familia.
“En nuestro caso todo se dio de forma tan natural y orgánica…fue fácil…”, respondió a la pregunta de Juan Minujin, quien se interesó por el proceso de integración familiar de sus hijos con los de Pampita, Bautista, Beltrán y Benicio.
“Yo ya los últimos años estaba con ganas de conocer a alguien, de volver a darle una oportunidad a la familia”, contó Moritán.
“Lo más fantástico fue que nuestros hijos, desde el primer minuto, tuvieron trato de hermanos, se pelan como hermanos, se tratan como hermanos, se extrañan como hermanos”, explicó emocionado.
Fue entonces que Andy le consultó sobre su vínculo con el ex de su esposa, Benjamín Vicuña. Correcto, respondió: “Caro no habla de Benjamín y no voy a hablar yo, pero me parece divino”, dijo. “No hay ningún conflicto”, completó.
