En medio de la pandemia y cuando muchas parejas se disolvieron, Sabrina Ravelli (35) hizo el camino contrario y encontró el amor y al padre de su hija… dentro del mismo edificio. “Éramos vecinos. Vivíamos en un complejo de dos torres, en Villa Urquiza. Yo me había mudado ahí, pero él hacía un año que estaba en el lugar”, contó la modelo cuando anunció que se encontraba en la dulce espera.
Los meses fueron pasando y en medio de la cuarentena, la ex de Matías Ale vivió el momento más importante de su vida el martes 15 de junio al dar a luz a su primera hija, fruto de su relación con Maximiliano Minoli, un muchacho dueño de una bicicletería ubicada en Villa Urquiza.
Y si bien se mantuvo bastante reservada durante la gestación de su hija, y solo apareció en los medios en dos o tres oportunidades, Sabri se abocó de lleno a transitar esa etapa tan anhelada por ella, y que en las últimas semanas la tuvo un poquito preocupada ya que no engordaba, por ende, no se alimentaba bien la beba.
Y fue el día lunes que Ravelli empezaba a palpitar la llegada de su hija cuando apareció en las redes sociales con un posteo, mostrando su pancita y escribió: “ya en las 40 semanas y a punto de explotar. ¿Cuánto tiempo más te vas a hacer desear, Ainhu? Esperándote con mucho amor”.
Finalmente, la cuenta regresiva terminó y Sabrina se convirtió en madre. Feliz y llena de emoción, la Dj compartió a través de instagram el hermoso momento personal, “Bienvenida Ainhoa. Ainhu: así te esperábamos anoche. Con las pulseras en mi brazo para tu piecito y tu muñequita".
Además, según las imágenes de sus historias, donde se ven las fichas médicas y pulseras de la clínica, la pequeña nació en el Sanatorio de los Arcos a las 21:59, pesando 3 kilos. Sin dudas, y a pesar de los miedos por el banjo peso de Ravelli, la beba se alimentó muy bien y completó el ciclo total de gestación.
"Bienvenida Ainhoa. Ainhu: así te esperábamos anoche. Con las pulseras en mi brazo para tu piecito y tu muñequita", escribió la flamante mamá.
“Gracias por el hermoso equipo. Gracias por traer a mi bebita con tanto amor”, manifestó la flamante mamá en agradecimiento a los médicos que la asistieron en este momento de la maternidad donde bien supo destacar, “fue buscada con mucho amor". ¡Felicidades!
El nombre que eligieron Ravelli y su pareja es vasco y en idioma euskera significa "la de tierra fértil". Es la advocación de la Virgen de Nuestra Señora de Ainhoa, cuya imagen se venera en un santuario de la localidad homónima del País Vasco-Francés. Es el nombre de la ciudad vasco-francesa donde se dice que apareció una visión de la Virgen María. Es un nombre muy frecuente en esta región, aunque hoy día se ha extendido por toda España y está en el top de 100 nombres más populares en español aunque es prácticamente desconocido en otros lugares.
