La pionera en apostar al chip sexual en la Argentina fue Carmen Barbieri. Mejor dicho, una de las pioneras. Para sorpresa de todos, la capocómica había contado que el dispositivo le garantizaba más de un beneficio. Especialmente, a nivel hormonal. Después, Catherine Fulop reveló que también se había animado a probarlo.
Ahora, un varón contó públicamente que el chip le cambió la vida. Al menos, la sexual. ¿Quién eligió colocárselo? Sergio Goycochea. "Me puse un nuevo chip sexual, el segundo. Mejora la calidad muscular, el ánimo y también la libido. Después de cierta edad se pierde tetosterona", confesó el conductor en De vuelta al mundo, el ciclo radial de Daniel Ambrosino en Radio El Mundo.
¿Por qué el ex arquero optó por ponerse el chip? Lejos de hacerse el misterioso, reveló el motivo: "Cualquier persona que pasa los 50 años, sabemos que empieza a perder hormonas, la testosterona se empieza a dejar de generar. Ayuda a la consistencia muscular, levanta el ánimo, ayuda al colesterol, a la diabetes, controla esas cosas y sobre todo el apetito sexual".
Antes de cerrar, el hombre explicó cómo se aplica y aclaró que el procedimiento no duele nada: "Son como unos granitos de arroz, que te inyectan de forma subcutánea a la piel, no duele nada, y va soltando cada seis meses la cantidad de testosterona que tu cuerpo necesita. Venía haciendo otros tratamientos, pero ahora ya voy por el segundo chip”.
¿Se animarían a probarlo?
Por Agustina Rinaldi
El ex arquero se siente más a gusto con su vida sexual desde que apostó al chip.
