Pablo Echarri se erige en un punto de coincidencia que une a Natalia Oreiro y Nancy Dupláa, dos talentosas y bellas actrices, que surcaron por la particularidad de enamorarse del galán. La uruguaya supo disfrutar de ese noviazgo que terminó en el 2000 y al poco tiempo se encadenó el lazo con la ex de Matías Martin.
Ese periodo algo gris en la cronología de Echarri activó una serie de investigaciones del mundo del espectáculo, porque muchas voces se aventuraron a asegurar que Nancy aterrizó en la vida del actor durante la vigencia de la pareja con la cantante.
De hecho, eso provocó las especulaciones de una eterna rivalidad entre Dupláa y Oreiro. Una confrontación que jamás adquirió confirmación de ninguna de las dos partes, pero que quedó sobrevolando en el aire como una certeza casi absoluta.
Todo eso se derrumbó con un gesto de Natalia. Resulta que Nancy se detuvo en la entrega de los Premios Cóndor a hablar con Socios del espectáculo, en plena entrevista apareció de la nada, como un rayo, la uruguaya y le estampó un beso muy cariñoso en el cachete.
Esa maniobra se mostró en el ciclo de Rodrigo Lussich y Adrián Pallares, quienes no pudieron contener sus reacciones de sorpresa por el improvisado guiño de la mujer de Ricardo Mollo para con Nancy. Una situación espectacular, que tira por la borda cualquier versión de mala onda.
Natalia y Pablo supieron caminar juntos a la par en su juventud, en esos primeros años de trascendencia profesional y construyeron una relación amorosa que se extendió desde 1994 hasta el 2000. Luego, Echarri encontró el amor definitivo con Dupláa, la madre de sus hijos.
