Meses atrás, el aspecto físico de María Valenzuela fue tema de "debate". Muchos son los que opinaron que a la actriz se la ve extremadamente delgada. Cansada de los comentarios que, sobre todo, invadieron sus redes sociales, respondió con dureza para que dejen de "acosarla".
Pasó el tiempo y hoy la preocupación que cae sobre María tiene que ver con su estado anímico. Aunque está trabajando y recorre distintos destinos turísticos y ciudades con Eva y Victoria, el clásico teatral que recrea un diálogo entre Eva Perón y Victoria Ocampo, lejos de participar de actividades elige aislarse. Quedarse sola.
Valenzuela, luego de bajarse de los escenarios, pasa mucho de su tiempo en la intimidad de un departamento que alquiló en pleno centro porteño. Y eso tiene más que inquieto a su entorno, a qien que le gustaría que salga e interactúe con otras personas y que no se quede encerrada.
"Son varios los amigos y amigas de la actriz que están en alerta por su estado de ánimo. No son pocos los días en que se queda en el departamento alquilado de la calle Ayacucho, muy guardada", advirtieron desde su círculo más cercano.
"Lo consideran todo un tema, ya que además mantiene la casa y la familia, y pagar cualquier extra supone un problema", contaron, a modo de detalle, para explicar las "dificultades" que estaría trayendo el accionar de María, que no pasaría por su mejor momento emocional.
Este verano, Valenzuela logró tres nominaciones a los premios Estrella de mar, en Mar del plata, por su protagónico en la obra, que comparte hace ya un tiempo con Sabrina Carballo, con quien hacen una sólida dupla arriba de las tablas.
