Se erige en un campo de compleja dilucidación imaginar a Wanda Nara como una musa inspiradora, como un ejemplo a seguir que active las motivaciones en otro individuo. No obstante, la mediática ha actuado como una fuente aspiracional para Andrea Rincón.
La influencia de la esposa de Mauro Icardi alcanzó tal grado, que la actriz se animó a confesar que literalmente le cambió la vida esas presencias de la blonda en los medios. Incluso, Andrea reconoció que sin Nara probablemente su realidad distaría enormemente de la actualidad.
Increíble, pero real. Rincón se lanzó a narrar esos días aciagos, difíciles en los que se debatía en su interior sobre qué camino tomar y el peso que talló en esa época la buena de Wanda. Todo esto surgió de la visita de la morocha al living de No es tarde, el ciclo de Telefe.
Todo se activó ante la pregunta de Germán Paoloski: “¿Por qué decís que Wanda te salvó la vida?”. Así, Rincón se sumergió en la explicación de esa llamativa aseveración: "Le prendo velas todas las noches. Yo dije si ella puede, yo puedo".
¿Qué pasó? Andrea describió el panorama de esa etapa de su vida y cómo influyó Wanda: "Yo estaba pasando un momento bastante difícil en un momento. Tenía otra realidad, que mucha gente tiene esa realidad. Cuando vi a Wanda que estaba bailando arriba de un escritorio, la gente que estaba trabajando ahí esa noche la arengaba”.
Para culminar la anécdota, Rincón narró: “Cuando se bajó del escritorio, se sube a un Mini Cooper y dice ‘ahora voy a mostrar mi casa'. Y muestra un tremendo piso en Puerto Madero. Yo volví a mi piecita de pensión de dos por dos. Me puse en bolas, me miré al espejo y dije: 'acá algo tiene que cambiar'. Ahí fui a mi casa y le dije a mi papá que iba a ser vedette".
