Tras una montaña de años animando las mañanas de El Nueve, Ariel Rodríguez Palacios sorprendió en las últimas semanas con una mudanza llamativa, dado que se pasó a la pantalla líder de Telefe, para también amenizar una franja horaria caliente.
El cocinero asumió el desafío, dentro del plan de reestructuración de la programación de la señal más vista de la industria. Claro que rápidamente le llovieron los resabios de una polémica, dado que quedó envuelto en la extraña salida de Romina Pereiro.
La ex esposa de Jorge Rial rubricó un contrato para realizar una columna de nutrición dos veces a la semana, posteó con algarabía la noticia y repentinamente, a horas del debut, le comunicaron que no sería parte del staff. Eso activó una investigación que derivó hasta en una supuesta influencia negativa de su ex marido.
Lo cierto es que Ariel navega por la excitación de esta aventura, el desembarco al canal más potente de la televisión abierta. Una felicidad que comparte con su hijo Felipe, quien configura un tándem al aire a partir de su expertise como cocinero.
Esta variación en la cotidianidad de Rodríguez Palacios acentuó el foco en su vida personal, así se maximizó en las últimas horas el interés por conocer aspectos de su privacidad. Entre los que se destaca su esposa Valeria, esa mujer que eligió para caminar por el altar hace 30 años.
Sí, Ariel continúa enamorado de esa alma, con la que celebró una boda en 1992, cuando tenía 25 años. Valeria opta por el perfil bajo, incluso no posee redes sociales activas, aunque el cher siempre la ponderó como un pilar fundamental en su vida.
En alguna oportunidad, Rodríguez Palacios se rió, en una entrevista en el diario Clarín, de la capacidad gastronómica de su esposa y narró que en una ocasión puso un pollo al horno con la bolsa de menudos en su interior, lo que produjo como resultado un sabor incomible.
De la mano de Valeria, Ariel se convirtió en padre de Gaspar, Felipe, Máximo y Lourdes. Este familión suele reunirse los fines de semana en el hogar paterno, para que el animador los agasaje con sus platos, porque ama preparar delicatessen para sus seres queridos.
