Cinthia Fernández mantiene su enemistad con Luciana Salazar. Y, este viernes, mientras opinaba sobre la foto de la rubia con su ama de llaves en un supermercado muy famoso de la zona norte, sorprendió con una confesión que no la dejó muy bien parada ni a ella ni a sus hijas.
¿Por qué? En Los ángeles de la mañana, por El Trece, Cinthia contó que en algunas oportunidades fue a hacer las compras acompañada por Carmen, la mujer de confianza que trabaja en su casa y la ayuda con la crianza de las tres nenas. Y allí pasó algo muy grave.
Al aire, Fernández confesó que Charis, Bella y Francesca robaron en varias jugueterías después de que Angel De Brito, conductor del programa, le consulte si lo hacía mientras adquirían alimentos.
"Han afanado jugueterías, lo tengo que decir. Y no me he dado cuenta. Y afanan cosas carísimas. Afanan bien. Son buenas mecheras”, reveló la mamá.
“Lo ponen en el changuito del bebé. Yo iba con el carrito (el de las mellizas tiene un buen baúl) y ellas iban poniendo todo abajo", recordó Cinthia.
“Y vieron un bebé que tengo que vender el riñón si quiero comprarlo y lo agarraron y tiraron el bebé abajo”, agregó la panelista, que supo manifestar sus "celos" al ver fotos de Martín Baclini con una modelo en esta última semana.
“Cuando llego a mi casa, estaba todo tapado con las compras del supermercado. Nunca lo vi porque el bebé es negro y el fondo del baúl es negro. Después lo vendí", finalizó Fernández. ¡Qué cara!
