El Hotel de los Famosos está llevando invitados semana a semana, por lo que esta vez tocó el turno Nicolás Maiques, Imanol Rodríguez y Pato Galván. El influencer se fue dos semanas atrás, en donde fue eliminado por el único amigo que le quedaba en el programa, Martín Salwe.
El hijo de Miguel Ángel Rodríguez siempre fue neutro desde un principio, pero en sus últimos tiempos en el ciclo conducido por Pampita y el Chino Leunis, empezó a sentirse parte de la familia, más aún cuando se crearon los sanguinarios, por lo que la gente empezó a molestarse con él.
Imanol lo primero que hizo fue contar sus experiencias fuera del programa, por lo que contó: "Todavía me está costando volver a la realidad. Es un flash, el celu terrible, tipo lo agarré y no lo solté y fue como que me re abrumé, tenía la cabeza explotada mal".
"Como que mucha data, viste. Quedé con la cabeza explotada. Entre Instagram, WhatsApp, Twitter, todo, me puse a ver lo divertido. Al programa a los últimos tres los vi enteros, soy un espectador más y lo vivo como si fuese una película, miro lo que tengo ganas de ver y después me rio de todo", afirmó.
Antes de irse del programa, Imanol tuvo un ataque de furia con Juan, el cocinero. "Esta semana fue el mejor staff del mundo, no lo digo porque yo sea el gerente de guardia, sino porque realmente es así", comentó Imanol mientras llegaba a la cocina, y al ver a Juan, la cara y humor de todos cambió, en donde el mismo Rodríguez comenzó a gritar.
"Me explicas, se rompió la matriz, no se que pasó, que vida de mier.... Me pasa algo con Juan de que un poco lo quiero, por otro lado lo odio, entonces en el balance creo que pesa más el odio. Yo tengo una opinión sobre algo, no quiero que aparezca a la mañana, cuando arrancas el día", sostuvo el hijo de Miguel Ángel. Juan lo único que dijo fue: "¿A ustedes les parece que quiero estar acá con ustedes", a lo que todos contestaron que no.
Ya fuera del hotel, Imanol confesó cómo la está pasando su amiga Emily Lucius: “Siento que entró a un mundo para el que no estaba 100% preparada y se encontró con un monstruo que es la tele. Creo que muchas cosas la tomaron por sorpresa y no pudo manejarlas. Realmente es un impacto fuerte lo que pasó afuera. Cuando se sienta preparada lo hará y hablará. Es una mina divina, creo que hay muchas cosas que se exageraron, pero doy fe de que Emily no es una mala mina”.
