Se fue para no volver. Ivana Nadal tomó una tajante decisión que involucra su futuro tras lograr una transacción inmobiliaria que cumplirá su sueño. La influencer que promueve la vida espiritual decidió dejar atrás su vida en Argentina, donde estuvo instalada los últimos meses, y arrancar de cero en el exterior.
Después de ofrecer su departamento en Martínez hasta por redes sociales y con algunas equivocaciones incluidas, Ivana logró vender su propiedad y hacer el traspaso al nuevo dueño que ocupará el lugar.
Nadal quería deshacerse del inmueble porque su idea era irse del país por un largo tiempo y no quería que haya nada que la “atara” a compromisos de pagos y mantenimiento. Y cuando apareció un comprador interesado en el depto cercano a un conocido shopping de zona norte, cerró trato.
Y con un problema menos para ella, Ivana armó las valijas y planificó una mudanza para poder llevarse lo que consideraba de importancia y se instaló en Miami, donde planea vivir de ahora en más, después de haber sido criticada en reiteradas oportunidades por la tevé local y los usuarios de redes sociales por sus mensajes espirituales.
Incluso, en algún momento, se habló de que Nadal era parte de una secta que reclutaba gente y por eso es por lo que sus discursos resultaban extraños y contradictorias para gran parte de la gente, hasta con rastas incluidas.
Pero más allá de que eso Ivana lo padeció, por lo menos en lo que transmitía con los videos que publicaba en su cuenta de Instagram, para ella ahora comenzó una nueva etapa lejos de todo y de todos, donde su prioridad por estos días es disfrutar de las playas de Miami, aunque el verano comenzó con una nueva ola de Covid 19.
