Un percance inesperado, una maniobra espontánea que derivó en una situación embarazosa. Un episodio traumático que se maximizó por la visibilidad del escenario, por el contexto en que sucedió y la sumió en un trance que la marcará a fuego.
Jésica Cirio protagonizó un capítulo llamativo en la entrega de los premios Martín Fierro, dado que en pleno instante en que recibía, junto a sus compañeros, una estatuilla carga de emoción por el recuerdo de Gerardo Rozín sufrió una dificultad con su vestido y estuvo varios segundos con la lola al aire.
Con la mirada de millones de espectadores y sobre todo con la fuerza de las redes sociales, el recorte de ese momento se transformó en un video viral, que la posicionó como tendencia. Con la intriga como motor, una montaña de usuarios reprodujeron esas imágenes.
Tras vivenciar esa problemática, Jésica se paró delante de los micrófonos de Intrusos, todavía en las instalaciones del hotel Hilton, y fue abordada por el cronista, que le consultó: "Hubo muchos tweets con tu nombre, por lo que pasó en el escenario, que se te bajó un poco el vestido".
Sorprendida y sin disponer de la dimensión del hecho, Cirio reconoció: “No me digas. No lo puedo creer. Nunca me enteré". Claro que lo más sustancioso llegó al ver el video en primera mano, lo que permitió divisar la reacción instintiva de Jésica, que exclamó con sinceridad: "¡Noooo! A mí me dijeron acomodate, pero nunca me percaté. ¡Un papelón!”.
Con las emociones a flor de piel por todo lo que significó Gerardo Rozín, y el valor de ese premio que recogieron en la gala, Jésica realizó una reflexión y sostuvo: “Qué lástima. No da. Todos están hablando eso, de la teta". Mientras que en el escenario le dedicó unas lindas palabras al rosarino. “Este premio es para Gerardo, que sé que está acá presente y agradecido. Gracias de verdad".
