Adabel Guerrero implementó una “extraña” convivencia con la ex de su marido. La ex participante del Cantando 2020 se mudó con Claudia, ahora su mejor amiga, y los hijos de su pareja, Martín Lamela. En Almorzando con Mirtha Legrand, la bailarina contó los detalles de su nueva vida como una gran familia.
“Se puede ser mamá, esposa y trabajar en Sex virtual. Ahora nos mudamos, gracias a Dios, a una casa más grande. Antes era más complicado en un departamento. Armo mis sets donde no están los chicos. Porque, encima, estoy también con los chicos de Martín. Claudia también se está quedando en casa…”, arrancó Ada.
“No somos open mai, lo que ustedes piensan. No, no, somos bastante… Pero nos llevamos muy bien con Claudia. De hecho, es mi mejor amiga en este momento porque me ayuda con Lolita, que es mi nena de dos años y medio. Yo la ayudo con los chicos, les hago la comida al mediodía, ella me ayuda a la noche”, contó la mamá.
"Siempre tuve muchos problemas en mi infancia. Entonces, esto me brinda el domingo la mesa grande, con Claudia hacemos fideos", confió Adabel.
“No es que yo lo busqué, se dio. Nunca lo imaginé. Fue después de trece años, no es que al toque fuimos mejores amigas. Ellos se fueron a vivir a Mendoza muchos años, volvieron el año pasado", dijo.
"Ahí empezamos una relación con Claudia porque le di trabajo en la escuela. Que le de clases a las más chiquitas que empezaban a bailar con toda la didáctica y pedagogía porque ella es maestra jardinera”, recordó la experta en danzas.
“Lola la ama, la ama… La malcría. Yo le digo ´no le des caramelos´, ella le da caramelos. Entonces, empezó a ayudarme a cuidarla. Se la dejaba en el depto mientras hacía Sex. Y ahora, como nos mudamos a una casa grande en un country, donde no te permiten entrar y salir gente que no viva ahí, dijimos ´bueno, pasamos juntos la cuarentena´. Se habló, fue como entre todos”, compartió Guerrero.
"Martín es el más feliz porque tiene dos mujeres que lo atienden. La convivencia no tiene restricciones pero cada uno tiene su espacio", contó la bailarina.
“Los nenes están juntos, Lolita juega todo el día con sus hermanos porque no hay escuela y se quedan en casa. Salen a andar en bicicleta sino acá, en Capital, no pueden andar en bicicleta los chicos. Yo me compré una bici para llevar a Lolita atrás y salís a tomar un poco de aire. Es otra cosa que nos cambió la vida a todos”, se sinceró la empresaria.
“Yo soy muy feliz. Siento que tengo la familia que nunca tuve. Siempre tuve muchos problemas en mi infancia. Entonces, esto me brinda el domingo la mesa grande, con Claudia hacemos fideos. Yo estoy ahí, parece de locos, pero a veces todavía no lo puedo creer. Armamos los fideos, hacemos el tuco, ponemos la mesa, lavamos los platos, yo seco mientras ella lava, es hermoso”, contó la artista a Juana Viale.
“Martín es el más feliz porque tiene dos mujeres que lo atienden. La convivencia no tiene restricciones pero cada uno tiene su espacio para que este cómodo en su privacidad. Estamos cómodos, cada uno tiene sus espacios”, concluyó la integrante de Sex Virtual.
