Hay una pregunta que se hace todo el ambiente televisivo y buena parte del mundo farandulero: ¿Qué le pasa a Viviana Canosa? La periodista entra en la tercera semana de ausencia a su programa de A24 y crecen tanto el misterio como la preocupación en cuanto a su salud. En las últimas horas, para colmo, ella se expresó en sus redes sociales, pero en vez de aclarar, el panorama también se empantanó.
La ausencia de Canosa de sus labores profesionales coincidió con el brote de coronavirus (variante Delta, supuestamente) detectado en una de las sedes del Coelgio Ort, al que asiste su hija.
Atando cabos, muchos usuarios consideraron probable que la conductora, acérrima enemiga de las medidas restrictivas contra el covid, haya quedado aislada por algún contacto estrecho pero prefería no admitirlo porque sería "reconocer" la existencia del virus.
Canosa intentó negarlo subiendo exámenes de anticuerpos, pero la gente siguió con su descreimiento y pidió un diagnóstico concreto, que nunca llegó. El "faltazo" se fue estirando y los rumores también se acrecentaron junto con la incómoda y extraña situación.
La semana pasada, además, Luis Novaresio dio una nota en LAM donde brindó un diagnóstico que también sonó impreciso a los oídos de los internautas.
"Creo que tiene largingitis", arriesgó el rosarino, quien pocos segundos después aclaró que "le mandé dos mensajes a Canosa, que nunca me contestó. Tampoco es que somos amigos o que nos vemos seguido. Somos compañeros de canal y hacemos el pase de un programa al otro, donde varias veces hemos discutido. Hasta tuvimos que hablarnos en privado para pedirnos disculpas y acordar un tono moderado".
Aquellas palabras de Novaresio alertaron a los seguidores de Canosa, quienes además de desearle una pronta recuperación le pidieron algún dato más preciso en cuanto a su estado.
Y Canosa se manifestó en sus redes sociales, pero en vez de aclarar... oscureció. "Se acaba de ir mi médico de casa. Me recomendó unos días más de descanso para evitar recaídas", comunicó.
Y aunque estaba anunciando que su ausencia se prolongaría todavía unos días más, Canosa intentó llevar un poco de calma a sus fanáticos. "¡Ya falta menos! Los quiero y los extraño. ¡Nos vemos muy pronto!", terminó, sin poner qué tiene (o que tuvo) a ciencia cierta. Está en su derecho, claro.
