La cuarentena le cambió la vida a todo el mundo. Algunas en pequeñas cosas. Y a otras de una manera más radical: en eso anduvo Ingrid Grudke, quien dejó el mundo del modelaje, entrenó muy duro, cambió su alimentación y ahora se quiere convertir en una estrella del mundo fit model.
Pero, ¿qué es todo eso? Lo va a explicar ella paso a paso. "Empecé desde casa con mi entrenadora", aseguró sobre su ingreso al mundo del fisicoculturismo. Y ahora reveló que va a competir en el torneo de Arnold Schwarzenegger en Europa: “Sí, voy a viajar”, sumó.
"Durante la cuarentena empecé a entrenar desde mi casa con mi entrenadora, que ella sí es fisicoculturista. Al principio quería moverme, hacer algo dentro de mi casa, y lo empecé a hacer como un tema de salud. El torneo tiene diferentes disciplinas y una categoría se llama Fit Model, que tiene que ver con el cuerpo trabajado pero sin usar la hipertrofia muscular. Para eso, estoy en un plan de buena alimentación", explicó.
“Hay un reglamento y unas medidas que tenés que tener para poder entrar. Tenés que presentarte en traje de baño y un vestido de gala con ciertas características. Se hace como un desfile primero en traje de baño y después con el vestido. Para mí era importante hacer algo y no estar quieta, me parecía importante mover el cuerpo en cuarentena, no era mi objetivo entrar en este torneo”, continuó.
“Me pareció divertido ser parte de este torneo, haciendo algo diferente. No hay premio porque es amateur, es la satisfacción de ser parte. Todavía estoy viendo qué diseñador me hará el vestido para la competencia. Estoy contenta con esto”, aportó y mostró su antes y después desde que comenzó a entrenar.
"Yo tengo problemas respiratorios y eso me mejoró mucho, el dormir, descansar mejor... Y cada vez me sentía mejor internamente. Con la cuarentena el año pasado empecé a entrenar con una fisico-culturista porque necesitaba entrenar mi cuerpo vía online tres veces por semana”, siguió Ingrid.
Hace unas semanas, en un posteo de Instagram, Grudke contó más intimidades: "Me habrán escuchado más de una vez decir que cada mujer es única. Que nunca debemos compararnos y que siempre tenemos que fijarnos en nuestra herencia genética y, en base a eso, sacar nuestra mejor versión, pero que todo depende de nuestra voluntad”.
“No importa dónde estés, los años que tengas o la genética que te tocó, siempre podés estar mejor. Por eso yo, en este punto de mi vida y en un momento tan particular que estamos viviendo, encontré una oportunidad para desafiarme. Desde hace un año estoy entrenando una hora, de tres a cinco veces por semana, con una rutina armada”, agregó la rubia, que le cerró las puertas a la maternidad.
"Y no sólo lo hago por esto, también pienso que ahora logre fortalecer mi cuerpo, mente y todo mi organismo; es invertir en mi salud. Creo mucho en la capacidad del humano, la voluntad y la fuerza de hacer lo que realmente quiere lograr. No digo que sea fácil el camino, pero para llegar a una meta deseada hay que poner ganas para ver resultados", terminó.
