Este fin de semana, y después de más de un año de ausencia, Mirtha Legrand volvió excepcionalmente a ocupar su lugar de anfitriona en su programa, que desde que estalló la pandemia quedó a manos de su nieta, Juana Viale.
A Mirtha se la vio divina, radiante y feliz de regresar con una “mesaza” a la altura de la circunstancia, con Diego Torres, Ricardo Darín, Darío Barassi y Jey Mammon; un dream team de invitados muy fuerte, y su fiel audiencia de siempre, agradecida.
Es que Chiquita se hizo desear durante meses y fue mucho lo que se dijo en torno a su vuelta. Más allá de sus problemas de salud, que la llevaron a una intervención quirúrgica y a tener que guardar lógico reposo, las versiones de que su regreso a la TV se demoraba por internas en la familia empezaron a sonar fuerte.
Y ahora, Beto Casella confirmó esta idea al revelar un picante dato de una fuente cercana al clan Legrand en Por si las moscas, en La Once Diez/Radio de la Ciudad. Porque, aparentemente, la diva, ya recuperada y en forma, querría seguir en 2022 al frente de su querido ciclo, pero….”no la dejan”.
“Nosotros medio en chiste decíamos que Mirtha no volvía porque la tenían secuestrada, y alguien cercano nos dijo que era ‘algo así’”, dijo el conductor de Bendita, a quien nunca le cerró Juana como conductora del histórico ciclo de su abuela, como lo dejó expreso en más de una oportunidad.
Según Casella, en la familia hay un teje y maneje considerable que estaría desoyendo los deseos de Mirtha, que el 23 de febrero cumple 95 años. “Después hablé con alguien cercano a ella que dijo que ella quería volver y que no la dejaban, pero me lo planteó como una problemática”.
Y cerró, muy polémico: “A mí me parece que, siempre que ella quiera, tiene que volver. Y por lo que alguien muy muy cercano a ella me dijo, ella tiene unas ganas locas de volver y no la dejan”.

