Los ánimos están “caldeados”. Ángel De Brito tiene un doble enojo: por un lado con el bajo rating que recibe LAM, y por el otro con el cambio de horario que se avecina en las próximas semanas.
Ángel, el conductor de Los ángeles de la mañana, pasa días de bronca e incertidumbre. Por el lado, la competencia que le genera Telefé hace que su programa, en la segunda mañana de El trece, arranque con bajo rating.
Moisés se llama la novela bíblica brasileña que el canal competencia supo tener al aire por las noches con un éxito arrollador. Y ahora, por las mañanas, con mediciones de 8 puntos en horarios que es casi imposible conseguir ese número…
Eso hace que las mediciones sean difíciles de remontar cuando comienza el periodístico de espectáculos. Por eso, no fue casual el mensaje que De Brito publicó en su cuenta de twitter. “Estoy tomando clases de remo jajaja”, escribió el periodista, que viene de hacerle "frente" a una desafortunada reacción de Charlotte Caniggia.
Pero este no es el único motivo que al comunicador lo tiene inquieto. A partir de abril, el programa se “muda” de horario y le sacan media hora de aire. A partir de comienzos de mes, arrancará a las 10, una hora antes.
Y como si fuese poco, el ciclo que al aire duraba dos horas, pasará a hacerlo una hora y media -Angel se suma a La academia de Showmatch, que ya tiene grupo de whatsapp entre los jurados– porque se achicó toda la programación de la mañana y el mediodía. ¿El objetivo? Ganar una hora y media de espacio para que ingrese al canal del "solcito" un nuevo formato conducido por Mariana Fabbiani.
También, a partir del próximo mes, reducen el horario del noticiero de la mañana, Arriba argentinos, de Nosotros a la mañana, conducido por Pollo Álvarez y el de Ángel, para darle paso a Fabianni, que hace tiempo que quiere instalarse en los mediodías.
Será cuestión de esperar a que termine marzo y se reacomoden “las piezas” ante la nueva realidad que a De Brito lo hará competir con productos aplomados en la pantalla chica.
