El lunes 26 de diciembre, Daniela Celis reingresó a la casa de Gran Hermano luego de ser expulsada a raíz de una nominación espontánea realizada por Coti, de quien prometió vengarse si volvía al reality gracias al repechaje.
Daniela se reinventó como “Vengañela” y en sus primeros momentos cumplió con su plan justiciero. Después de una escena, digna de culebrón de la tarde, en la que le hizo tremendo desplante a Thiago, la morocha siguió con Coti, a quien saludó con frialdad.
Al verla aparecer envuelta en una manta y aparentemente feliz de su vuelta, Daniela le negó el abrazo y la dejó pagando. La actitud afectó muchísimo a la novia del Conejo, que luego tuvo su catarsis con Camila en el jardín.
"Entiendo su forma de ser y su forma de pensar, pero cuando ella entró le quise dar un abrazo, porque la verdad es que entraste a Gran Hermano, me parece un momento de alegría que no está bueno cagarlo por una pelotudez, de última después haceme una espontánea, me parece perfecto", dijo Coti.
La participante, que viene de vivir una crisis de llanto por sentirse aislada en la casa, recordó: "Le quise dar un abrazo, me sacó las manos y me dijo: '¿Estás feliz de que esté acá otra vez?'. Y le dije que ´sí, que la verdad que sí´. ¿Por qué yo no voy a estar alegre? Si esto es un juego, y yo lo entiendo así".
Mientras que, desde el punto de vista de las amigas de Daniela, el reencuentro se leyó de otra manera. “Coti se quiere matar por el repechaje. No la podía mirar a Dani”, dijo Julieta mientras Daniela desarmaba su valija. Y señaló: “Me encantó que le dijiste: ‘¿Estás contenta de verme?’”.
