La convivencia con el vecindario siempre atañe sus particularidades, ya sea en un barrio privado lleno de lujos como en un entramado social más llano. La medianera se erige siempre en una posibilidad de problemas, así como en un campo de colaboración mutua.
Jorge Rial no le escapa a este axioma, a este comportamiento comunitario, y a pesar de habitar en una casona tremenda en el barrio de Belgrano, con diversas comodidades, también padece de cuestiones banales que le trastocan su cotidianidad.
El periodista, que está en boca de todos tras su renuncia a Intrusos, se lanzó a su Instagram a “denunciar” el conflicto que acontece con su vecino lindero. Todo esto se encuadra en la peculiaridad de animales poco habituales al suelo porteño.
Con un video, Jorge exhibió un rincón bellísimo de su jardín, pero que de fondo aparecía un ruido molesto. “A las 6.30 AM, un gallo canta todos los días. Todos los días. Todos los días”, escribió el afamado animador.
En la continuidad de su captura de la situación, Rial grabó el sonido que venía de la casa contigua y sostuvo: “Y ahora se suma una oveja”. De esa manera se percibía el rumeo característico de ese animal. Como si fuese poco, Jorge filmó al patio de su vecino y ponchó a la oveja y redactó: “Pusieron una granja en Belgrano”.
Cuando ya nada parecería generar sorpresa. En otra storie, el conductor televisivo enganchó a unas cinco gallinas caminando por los alrededores de la pileta de la casa de al lado. Impresionante. Para ponerle humor, Rial publicó: “Y tienen gallinitas también”.
