En un mes, Juana Repetto se convertirá en madre por segunda vez. Llegará al mundo Belisario, hijo de su matrimonio con Sebastián Graviotto.
En la última etapa de su embarazo, mientras transita sus días a puro zoom con el jardín de Toribio, su hijo de cuatro años, y se dedica a sus posteos comerciales en redes, Juana reflexionó sobre los cambios que le trajo la gestación.
Feliz de la vida con el bebé que está por llegar al grupo familiar -su primer hijo lo tuvo sola, por decisión propia-, Repetto analizó algunos cambios corporales que se le generaron en las últimas horas y que no dejan de sorprenderla.
Desde su cuenta de Instagram, Juana contó qué descubrió al momento de bañarse.“Me estaba bañando y noté que se me empezó a hinchar el tobillo. Venía bárbaro. Yo a esta altura con Toro pensaba 25 kilos más que ahora….”, recordó.
“Yo tenía el pie hinchado, pero tenía la vida hinchada. ¿Es normal? Estoy en semana 33”, consultó Repetto, a sus seguidores. Luego, la mamá le dio paso a otro balance sobre los últimos tiempos del crecimiento de su panza, y cómo repercute en su sueño diario.
“Octavo mes de embarazo. Lo mal que estoy durmiendo, ¿les pasa? Me levanto a hacer pis tres veces, también me levanto porque estoy incómoda y por los despertares me despabilo... Tardo años en volver a conciliar el sueño”.
También, habló de la clásica acidez -y otros malestares- que se presenta en las embarazadas y que, muchas veces, recurren a tomar todo tipo de licuados, para disminuir la sensación.
“Ahora con una acidez que me desmayo?, ¿es normal o no?”, consultó a sus seguidores, a la espera de una respuesta positiva o negativa, del otro lado del ciber espacio, después de ultimar detalles del cuarto para el bebé que compartirá con su hermanito.
Juana Repetto habló del último mes de su embarazo
Repetto se animó a proyectar como será su nueva maternidad, esta vez acompañada por una pareja. “Hay muchas cosas que al convivir con Toro, Sebi fue adoptando y viendo resultados que también le cierran. Así que con su apoyo estamos yendo para el mismo lado”.
“En lo personal siento que me va a costar un montón delegar y negociar. Siempre hice lo que me pareció mejor para mi primer hijo sin tener que consultar con nadie”, reconoció la influencer. “Estoy con expectativa, vértigo, algo de ansiedad y mucho amor”, finalizó, a modo de balance, Juana.
